La voz del mar
"La mia casa deve essere aperta al sole, al vento e alla voce del mare, come un tempio greco e luce, luce, luce ovunque!"
Otra contradicción. El texto que cité de Axel Munthe habla de sol por todas partes, y la fotografía es nocturna, y no hay sol, pero hay luna.
El punto en común entre cita y foto, es que ambas hacen referencia (o más bien tuvieron su génesis) en el sur de Italia, pero en lugares diferentes: Capri y Agrigento.
Otro punto en común, los templos griegos.
La cita de Munthe me gusta un montón, y la verdad es que no he leído su libro “La Storia di San Michele” pero este fragmento es como la bandera del turismo en Capri, una isla paradisíaca ubicada en el golfo de Nápoles.
Hace más de diez años anduve por esta isla que ha sido refugio de destacados escritores (incluido Pablo Neruda), ávidos de aventuras, placeres exóticos y serenidad, sobre todo serenidad en medio de paisajes naturales inigualables, y los vestigios de la civilización greco-romana.
Capri, es una isla hermosa, es cierto, pero más al sur de Italia hay otra isla que es igual de linda, y que ha sido conocida mundialmente a través del cine y la literatura como la cuna y el dominio de la mafia: Sicilia. Y es verdad, los mismo Sicilianos lo admiten, algunos orgullosos y otros indignados, pero nadie lo niega. La foto que ven acá arriba es de Agrigento, lugar ubicado en la costa sur de la isla. En Agrigento hay templos griegos ubicados estratégicamente en los montes que rodean la ciudad, y los mantienen iluminados todo el tiempo. Por eso cuando uno llega de noche y ve los templos iluminados en medio de la oscuridad, da la sensación de que estuvieran flotando en el espacio, y es una de las imágenes más cautivadoras que he presenciado en mi existencia.
Este post debe estar siendo una lata, seguro, pero anoche advertí que tal vez iba a escribir un par de entradas egoístas, exclusivamente para mí, si así lo sentía necesario. (Evidente que igual pueden leerlas y opinar si quieren).
Bien tanta referencia al sur de Italia, no es sólo de nostalgia de ese viaje, ni de re trazar los pasos de mi bisabuelo antes de venir a parar en barco a San Antonio (me encanta pensar que venía de polizón lo cual no es cierto). No es una reseña turística, ni mucho menos un guiño histórico cultural.
Todo esto es por que anoche soñé con Agrigento, y en el sueño repetía las palabras de Munthe, palabras originadas en Capri, pero que para mí estarán ligadas para siempre a la vista nocturna de los templos en Agrigento. La mente humana es así, hace las asociaciones como se le viene en gana, y se va llenando de recuerdos, llenando cada vez más.
Una vez un alguien dijo que era increíble pensar en lo acumuladores de recuerdos que somos los humanos. Y me dijo: “si somos tan jóvenes, si aún no tenemos 30 años y ya estamos llenos de recuerdos … te imaginas cómo va a ser después”. Esto me lo dijo en un atardecer primaveral caminado por providencia, y me gustó tanto … me gustaba también cómo decía “somos”, como decía la música que “nos gusta”, y así otra serie de cosas en plural, cuando en general antes nunca me había gustado tanta pluralidad. Esto no tiene nada que ver con Capri, ni con Agrigento, pero me salió así de repente.
Volviendo a las palabras de Munthe, me gustan por que fueron escritas en otro extremo del mundo, pero bien podrían haber sido escritas en Valparaíso o Viña del mar. Acá no hay templos griegos, es cierto, pero no estoy yendo a la forma que contienen estas palabras, estoy aludiendo al fondo: a ese deseo de desprenderse de todo (incluso de los recuerdos) y de dejarse acoger por el cielo y el mar. El mar es una imagen tan potente, me cautiva tanto, me hace pensar en mil cosas y a la vez en ninguna. Me siento plena contemplándolo, aunque después tenga que volver a todo lo demás, a las pequeñeces, a las preocupaciones, a la multivía, al café de la mañana, a los mails, a tanta cosa.
Por lo mismo puedo pasar horas en la salita mirador del ascensor Los Lecheros y quedarme así ensimismada, con los ojos allá, y en mi interior la voz del mar.
Por que yo también estoy abierta al sol, al viento y a la voz del mar y percibo luz por todas partes, a veces se me olvida pero mis sueños me lo recuerdan.
13 Comments:
Tu entrada fue como un mensaje subliminal de esos de coca-cola que salían en algunas películas, no sabes las ganas que me dieron de estar en esa isla.
Sobre la imagen que viste, es una pintura en cerámica que la hurté de la web, traté reiteradas veces de abrir la página nuevamente pero no tuve buenos resultados, si lo logro te daré más datos.
Saludos...
6:20 p. m.
A mi me paso lo mismo... me dieron demasiadas ganas de estar en esa isla, aunque yo soy un ser eminentemente urbano.
Es cierto como la mente mezcla las cosas a su antojo... quizás sea por eso que ninguna persona ha logrado entender completamente al ser humano.
Y sigue con tus posts para ti ;)
Saludos
9:34 p. m.
tienes toda la razon con respecto a la isla de Capri, pero no dejes afuera la isla griega de Mykonos que es un paraiso en el Mar Egeo. Aprovechando el vuelo un poco de geografia no esta de ma.
chao fiel roxy a mi blog
3:33 a. m.
En su día me embelesó ese libro de Munthé, hoy no se si me gustaría tanto, pero desde luego es bonito.
7:42 a. m.
! Que hermoso Posteo !
La bella Italia y que suerte la tuya ... yo este año celebro los cien años de la llegada de mi bisbauelo de Italia a Chile .
Me encantarìa poder ir pronto a conocer una parte mia que es ancestral ...Pero con tu relato me nutro de màs referencias .
! Gracias!
9:02 a. m.
Roxi:
SI supieras CUANTO extraño el mar y los cerros. Aca en Minnesota es todo plano, cielo abierto. Añoro esas formas misteriosas que se recortaban al atardecer sobre la cordillera y los cerros que rodean Santiago y la brisa fresca y salina de cualquier playa de la zona central. He oido de muchos santiaguinos decir que Santiago es feo, sucio e inhospito. Me atrevo a decir que cuando estas lejos aprecias la otra cara de la moneda, aquella que no veias antes teniendola enfrente.
Me pasa lo mismo que ati con el mar, podia quedarme horas en el paseo Atkinson mirando la bahia abierta para luego por la noche ir al muelle Baron a mirar los cerros iluminados. Mi conexion con el mar siempre ha sido muy profunda y ahora que no la tengo siento un poco que la he perdido, no pierdo la esperanza de regresar al mar.
Nos copuchamos luego,
Cariños.
6:58 p. m.
sabes, me provocó varias cosas tu post. me transportaste a las aguas del mediterráneo, entre ruinas y atardeceres frente al azul mar... me llevaste a sicilia, con sus mafiosos... me llevaste a un recuerdo tuyo sobre recuerdos... y finalmente al ascensor lecheros, mirando a la bahía de valpo......
mirar el mar siempre me ha provocado que muchas imágines y pensamientos atochen mi ser.. por eso debe ser q me gusta ir a la playa en invierno, me gusta los sonidos y los movimientos de ésta, observándolas por horas
saludos ¡¡¡
7:57 p. m.
Después d vivir 6 años alejada del mar no pude adaptarme y tuve que volver. Volveeeeeeeeeeeeeeerrrrr....
Hasta mi perro cuando veniamos de visita se volvía loco entrando a Bilbao, olía a mar y sabía que estabamos en casa.
8:09 p. m.
urgente: un tratamiento para cuatrismo, te lo dice otro "descompensado"
gracias por tu infinita simpatía.
9:12 p. m.
oye realmene hermoso tu escrito... viajé y lo disfruté... gracias por este placer...
saludos
9:55 p. m.
Gracias por este viaje,... lleno de luz. Algún día estaremos en esos soles.
Ten una excelente semana.
10:15 p. m.
Roxi, ya fuiste a BAires??? Paseé por el blog de la Sirita, vi tu nick me acordé y dije, uuuuuuuuufffffff, se me olvidó. Pero igual lo que quería recomendarte (porque en tu profile y algunos post hablas muchos de libros) es la Librería- Disquería "El Ateneo" que tiene varios locales pero yo fui al de Paseo Florida. LLegué con una lista de 17 discos para ver cual estaba y el tipo me los trajo todos en menos de cinco minutos. Te pierdes.
Bueno, el Unicenter también es una buena opción, los locales de musimundo, vaya a ver las obras o cafe concerts de Corrientes, péguese el pique a pie entre el Congreso y la Casa Rosada, visite el estadio de Boca -sin comprar encargos porque son caros como tampoco compre antiguedades en San Telmo porque cuestan mucho-, juéguese una fichita en el casino de Puerto madero, que se "cho", jejejeje.
Bueno, y si ya fue, sorry... Se me olvidó.
10:52 p. m.
saludos! aqui para variar leyendo tus voladas, que bien capri, yo tuve la suerte de pasar un domingo en la isla, la recorri caminando y para mi sorpresa perdido pase' por una casa que tenia una leyenda en honor a neruda, tragara o algo asi, esperaba playitas mas grandes pero bueh. Napoles el caos mismo pero me gusto', fui por trabajo asi que no pude recorrer mucho pero conservo gratos recuerdos, gracias por revivirlos.
8:14 p. m.
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