Una disgresión, de alguien que pretende dedicarse a escribir. Una especie de collage irregular, con ideas, uno que otro chiste, algún titular de diario, canciones, inquietudes, cualquier cosa que me diga algo, y que le diga algo a los demás.

abril 07, 2006

Murió Charlie Parker

Sí, ya sé, no es ninguna novedad, murió hace rato, para ser más precisa The Bird, murió el 12 de marzo de 1955. Pero no me refiero a ese Pájaro Libre que revolucionó el jazz con sus solos de saxo, estoy hablando de un pájaro que alcanzó a vivir poco más de 24 horas en mi departamento.
Esta es la historia del Charlie Parker de Providencia:
Tengo un gato que se llama Juanín (sí, en un extraño homenaje al perro chascón, coordinador de piso de 31 minutos), mi gato está creciendo, y como todo gato adolescente está tomando todas las malas mañas de su raza. Fue así, como el martes en la noche, mientras yo le servía un poco de pellets y agua para alimentarlo, el llegó con un pájaro bebé que apenas tenía plumas, en su boca. Según yo, como diciendo "tu comida apesta", según mi hermana y otros entendidos en costumbres gatunas, trayendo una ofrenda para mí, por lo mucho que me quiere. Pues bien Juanín, es una lástima que no puedas leer este blog, pero ese tipo de afectos no los quiero. Definitivamente no. Cuando el gato llegó con el pájaro en la boca, yo con mi clásica actitud evasiva y dificultad para enfrentar los momentos críticos, empezé a gritar histérica y me encerré en el baño. Mi hermana que estaba dormida, despertó asustada y rescató al pájaro. Mientras ella lo tenía en sus manos e intentaba tranquilizarlo, me dio instrucciones: no grites como loca, cálmate, trae una caja y llénala con diario picado. Ceremoniosamente dijo: "Se llamará Charlie Parker", el pájaro durmió en la caja, y con ciertas precauciones pensábamos que podría sobrevivir. Pero no fue así, y murió ayer jueves en la mañana. Murió.

Ayer a la hora de almuerzo con dos compañeros de trabajo, nos escapamos del rutinario almuerzo del casino de la empresa (ejercicio que intentamos hacer almenos una vez a la semana), y mientras almorzábamos algo bastante chatarra, uno de ellos no sé si producto de la hot sauce con que aliñó sus papas fritas, o de alguna sustancia extraña en su bebida, empezó a ponerse filosófico, es más metafísico. Planteó el siguiente tema: La percepción del tiempo. En un mall, comiendo comida chatarra, y paseándonos por divagaciones varias acerca del tiempo. A eso el llamo yo contradicción.
Bueno el tema quedó instalado: tempus fugit. Mientras hablábamos de la fugacidad de la vida, la transitoriedad de la materia, el concepto de muerte, la inmediatez de la experiencia, etc. Yo pensaba en Charlie Parker y me preguntaba si aún estaría vivo. Paralelamente les insistía a mis compañeros que ahora el tiempo se nos hace más fugaz, por que estamos metidos en el sistema productivo, que anula nuestras motivaciones profundas e ideas, y además por que tenemos conciencia de la muerte y de que cada vez nos queda menos tiempo. Por lo mismo, ahí estaba yo, incitándolos a hacer algo más significativo con nuestras vidas, invitándolos a leer el factor maya, ver la exposición méxico del cuerpo al cosmos, hacer introspecciones etc. Para mi sorpresa el más cuadrado de ellos, o al menos el que yo creía más cuadrado debido a su carácter computín, estaba mucho más abierto a escuchar todos estos temas (de hecho el planteó el tempus fugit) e hizo un montón de referencias a autores, análisis fenomenológicos, y debo admitir que me sorprendió, recordándome lo prejuiciosa que soy.

Ya en la tarde mientras iba para mi departamento, recibí una llamada al celular. Era mi hermana, quién me comunicó, lo que en el fondo yo ya sabía: Charlie Parker murió. Un día en el que conversé acerca del concepto de muerte y la huída del tiempo, terminaba de la manera más coherente.

Ahora para terminar de manera coherente esta entrada, citaré algunas partes de "El Perseguidor", gran cuento de quién va a ser, del mago Julio Cortázar, que está inspirado en Charlie Parker (no hablo ya del pájaro que murió en mi dpto, hablo de THE BIRD.). El personaje Johnny en medio de sus alucinaciones tiene unas percepciones del tiempo abismantes por su lucidez. Aparte de las impactantes y reveladoras imágenes de urnas por todas partes, acá van:

"Entonces creo que me di cuenta en seguida. La música me sacaba del tiempo, aunque no es más que una manera de decirlo. Si quieres saber lo que realmente siento, yo creo que la música me metía en el tiempo. Pero entonces hay que creer que este tiempo no tiene nada que ver con... bueno, con nosotros, por decirlo así."

"Esto del tiempo es complicado, me agarra por todos lados. Me empiezo a dar cuenta poco a poco de que el tiempo no es como una bolsa que se rellena. Quiero decir que aunque cambie el relleno, en la bolsa no cabe más que una cantidad y se acabó. ¿Ves mi valija, Bruno? Caben dos trajes, y dos pares de zapatos. Bueno, ahora imagínate que la vacías y después vas a poner de nuevo los dos trajes y los dos pares de zapatos, y entonces te das cuenta de que solamente caben un traje y un par de zapatos. Pero lo mejor no es eso. Lo mejor es cuando te das cuenta de que puedes meter una tienda entera en la valija, cientos y cientos de trajes, como yo meto la música en el tiempo cuando estoy tocando, a veces. La música y lo que pienso cuando viajo en el métro."

"Campos llenos de urnas, Bruno. Montones de urnas invisibles, enterradas en un campo inmenso. Yo andaba por ahí y de cuando en cuando tropezaba con algo. Tú dirás que lo he soñado, eh. Era así, fíjate: de cuando en cuando tropezaba con una urna, hasta darme cuenta de que todo el campo estaba lleno de urnas, que había miles y miles, y que dentro de cada urna estaban las cenizas de un muerto. Entonces me acuerdo que me agaché y me puse a cavar con las uñas hasta que una de las urnas quedó a la vista. Sí, me acuerdo. Me acuerdo que pensé: "Esta va a estar vacía porque es la que me toca a mí." Pero no, estaba llena de un polvo gris como sé muy bien que estaban las otras aunque no las había visto. Entonces... entonces fue cuando empezamos a grabar Amorous, me parece"

Si no han leído este cuento (aunque me cuesta imaginarlo) puden encontrarlo en internet, está en un montón de sitios, como tantos otros de CORTÁZAR.